Quién eres tú, si no el retumbar de mis latidos, el calor de mi sangre, el brillo en mis ojos.
Quién eres tú, si no la razón de mi existir, mis ganas de vivir, mis sueños por cumplir.
Quién eres tú si no todo sobre mí, pues en cada rincón de mi te encuentro y detrás cada puerta te espero.